Ryanair introduce la nueva “regla de los 40 minutos”: quienes no cumplan con este plazo se arriesgan a una sanción. Descubre de qué se trata y por qué la aerolínea ha decidido implementarla.
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Ryanair sigue estando en el centro de atención por sus nuevas normas.
Entre los cambios que entrarán en vigor a partir de mayo de 2025 — y que luego se aplazaron hasta septiembre u octubre de 2025 — destaca la obligación de utilizar la tarjeta de embarque digital, obtenida mediante el check-in online a través de la aplicación o el sitio web oficial de la aerolínea, y descargada en el dispositivo móvil.
Además, la aerolínea está prestando más atención al tamaño del equipaje de mano, que debe ajustarse a las dimensiones de 40x20x25 cm (equivalente a una mochila pequeña). Ahora, hay otra novedad.
Esta nueva norma, que aún no está en vigor, se llama la “regla de los 40 minutos”.
El objetivo de Ryanair es garantizar procedimientos más rápidos y eficientes para los pasajeros.
Con este fin, la compañía ha decidido establecer una hora específica de llegada al aeropuerto para evitar que los pasajeros lleguen tarde y retrasen el proceso de embarque o la salida del vuelo.
La normativa establece que los pasajeros deben llegar al aeropuerto al menos 40 minutos antes de la hora de salida del vuelo.
Este intervalo de tiempo ha sido elegido por la compañía como el mínimo necesario para realizar los controles de seguridad y afrontar posibles imprevistos.
Aunque la medida aún no se ha publicado oficialmente en el sitio web de Ryanair, ha sido diseñada para garantizar la puntualidad y una correcta gestión de los vuelos.
Según algunos medios irlandeses, la aerolínea ya ha enviado un aviso urgente a miles de viajeros sobre un posible error que podría resultar en una multa considerable.
Los pasajeros que se presenten en el mostrador de facturación con menos de 40 minutos antes de la salida del vuelo podrían recibir una multa de 100 € por persona.
Con la nueva norma, Ryanair recomienda llegar con antelación, ya que el tiempo necesario para el check-in y los controles de seguridad podría aumentar, especialmente en los períodos de mayor afluencia. Quienes lleguen tarde corren el riesgo de ser considerados como "no show" y perder el vuelo.
La nueva política se aplica a los viajeros que llegan al aeropuerto con menos de 40 minutos de antelación respecto a la hora de salida. Estos pasajeros podrían enfrentarse a una multa considerable de 100 euros por persona.
El objetivo de la compañía es evitar problemas entre el cierre del mostrador de facturación y el inicio del embarque. Los viajeros que lleguen tarde podrían ver su vuelo cancelado sin derecho a reembolso, con sanciones que pueden alcanzar hasta 120 euros, según el país.
Esta norma sigue a la introducción de una tasa de 55 € por realizar el check-in en el aeropuerto, si no se ha hecho previamente en línea a través de la app o el sitio web de Ryanair. Si el check-in no se completa al menos dos horas antes de la salida, todavía se puede hacer en el aeropuerto hasta 40 minutos antes del despegue, pero se aplicará una tarifa por el servicio.
Para evitar multas, Ryanair recomienda hacer el check-in en línea y llegar al aeropuerto con suficiente antelación.
Solo unos pocos viajeros aéreos conocen sus derechos, y muchos de ellos no tienen la comprensión legal necesaria para solicitar compensaciones por los retrasos de los vuelos. Incluso si son conscientes de sus derechos, el proceso de solicitar a las aerolíneas que proporcionen una compensación puede ser difícil.